La esencia de la innovación disruptiva sucede cuando (C. Christensen) las empresas consolidadas se duermen en sus laureles y no ven venir el ataque innovador de la nueva idea y entusiasmo.
Lo mismo sucede con la disrupción "big bang".
Son innovaciones disruptivas típicas y ampliamente citadas los casos del buscador de Google frente a GPS o el lanzamiento de Apple con su iTunes, Netflix que arrasó a Blockbuster, el Kindle de Amazon, etc. etc.
Cuando creíamos que teníamos una senda marcada para la innovación y con sus correspondientes carriles (donde la disrupción era uno de ellos) pues va y aparece la disrupción "Big Bang" en la que la llegada de nuevos productos ya no es disruptiva sino devastadora ya que innovar cuesta cada vez menos dinero, hay más tecnología disponible y, por si fuera poco, internet permite viralizarlo al momento. Esto es lo que afirman Larry Downes y Paul F. Nunes en su libro "Big Bang Disruption".
¿En qué consiste esta innovación disruptiva "big bang"?
¿Que es lo que ha cambiado de repente? Los autores dicen que esta nueva era comenzó en 2007 con la llegada del iPhone ya que "los smartphones son los motores para la rápida creación y distribución de disrupciones Big Bang.
En esta nueva era los emprendedores ya no respetan las viejas reglas y en lugar de desarrollar sus innovaciones en secreto lo hacen abiertamente y, además, permiten que los clientes prueben, mejoren e incluso co-creen sus diseños.
¿Qué hace a estas disrupciones "big bang" tan diferentes?
Tradicionalmente se marcaba la Estrategia en uno de estos aspectos: Enfoque en productos que fuesen mejores o más baratos que los de la competencia o estuvieran dirigidos a un nicho.
Todo a la vez: En la actualidad y gracias a las enormes posibilidades tecnológicas los nuevos actores entran en el mercado siendo simultáneamente mejores, más baratos y con más opciones de personalización que la competencia.
Cambia radicalmente el ciclo de vida de lo nuevo y la curva de su conquista de mercado es casi vertical y ello hace que muchas de las nuevas innovaciones tengan vida útil muy corta que las hace vulnerables. Hay un inicio aparentemente lento en base a una serie de experimentos sin una clara relación entre sí y que dan una sensación de calma relativa pero que cuando los innovadores combinan la tecnología necesaria con el modelo de negocio adecuado el despegue es inmediato hasta llegar al punto de saturación.
Ello obliga a estar continuamente desarrollando nuevas innovaciones y no fiar en que la inicial será duradera pues las "disrupciones big bang" pueden durar menos de dos años.
Pero ante esta avalancha disruptiva y devastadora... ¿tenemos posibilidad de alerta y reacción?
¿Cómo defendernos frente a disrupciones "big bang"?
Crear sistemas de alerta para detectar nueva tecnologías.
Colaborar y asociarse con los disruptores, en vez de combatirlos o ignorarlos, antes de su entrada a la batalla comercial.
Este fenómeno, junto al vertiginoso avance de la tecnología y las innovaciones en modelo de negocio, está produciendo cambios constantes y un avance espectacular en el campo de la innovación que obliga a las organizaciones a disponer de antenas de alerta, equipos altamente cualificados y estar inmersas en entornos colaborativos de co-creación.
Es momento de la Open Innovation acelerada.
Los propios autores hacen un análisis de la innovación en Tesla para ilustrar la importancia de este nuevo fenómeno. Indican que dicha empresa no cumple la tradicional definición de innovación disruptiva (lo cual no indica que Tesla sea extraordinariamente innovadora). Nunes y Downes NO incluyen a Tesla en ninguna de estas tres estrategias siguientes:
Océano Azul, basada en crear un nuevo mercado que modifica las expectativas de los clientes.
Incrementar los ingresos con menores márgenes para colapsar a la competencia y conseguir posicionamiento dominante que aflore una nueva propuesta de valor.
La propia de la disrupción "big bang" anteriormente comentada.
Tesla no es el única que produce vehículos eléctricos, no es el único que trabaja en el coche autónomo ni en la fabricación totalmente automatizada (IA, robots...).
Si llegados a este punto del artículo lo repasamos y confrontamos con el título inicial nos puede quedar la sensación de que lo realmente importante es la disrupción y más todavía si es en forma de la denominada "big bang". Nada más lejos de la realidad.
La disrupción tiene, sin duda alguna, una gran aureola que hace que se trate de generalizar sus ejemplos como un objetivo a conseguir para no quedarse rezagado en la carrera de innovación. Pero la realidad de muchas, muchísimas, la gran mayoría de organizaciones ni están ni tienen porqué estar en la disrupción y su innovación se focaliza de forma incremental, efectiva, tratando de minimizar riesgos (que no eliminando) y donde la aureola no es el objetivo.
No podemos ni debemos caer en la tentación de magnificar la disrupción cuando la realidad cotidiana exige innovaciones incrementales ya que son los resultados lo que importa y no tanto las aureolas.
