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En una entrada anterior, hablando también de Innovación Abierta,  indicaba: “La organización que innova debe disponer de personas innovadoras pero también debe dotarse de una organización adecuada para ello.

Las organizaciones tradicionales han estado muy enfocadas a lo que podemos denominar “mirar por el retrovisor” lo conseguido y reaccionar sobre lo ya realizado. Pero la innovación es plenamente “mirar hacia adelante” e incluso lo que hay después de la curva.

.Es por ello que la organización tradicional no es válida para esta nueva realidad.”

La nueva realidad ya estamos acostumbrados a denominarla VUCA (Volátil, Incierta, Compleja, Ambigua) y lo hemos comprobado de forma violenta con la crisis de pandemia del Coronavirus SARS-VOV-2.

Veamos estos tres factores anteriores de forma unida:

  • Así pues la actual situación y que va a quedarse por largo tiempo es una realidad que asociaremos a “entorno turbulento-VUCA”.
  • Al mismo tiempo vemos como la Innovación Abierta se está presentando como uno de los mecanismos preferidos para proyectos de innovación de todo tipo.
  • Al mismo tiempo y desde los años 70 del siglo pasado el liderazgo se ha constatado como uno de los pilares fundamentales para entender las organizaciones y su caminar para conseguir los objetivos, haciendo de la comunicación uno de sus recursos fundamentales.

Tenemos, de esta forma, una composición de palabras clave que son las que dan título a este aporte: Entorno turbulento-Liderazgo y comunicación-Innovación Abierta.

Lo podemos ver de la siguiente forma secuencial:

  1. Vamos a desarrollar un proyecto bajo la fórmula de Innovación Abierta.
  2. La situación real que nos rodea es inestable, turbulenta (de forma general VUCA) y tenemos incertidumbre de qué hacer.
  3. Encima vamos a realizar el proyecto conjuntamente con otras organizaciones que se encuentran en situación similar.
  4. Alguien tiene que liderar el proyecto y se tienen que establecer comunicaciones fiables y claras entre todos.
  5. ¿Cómo lo afrontamos?

Veamos una serie de respuestas para resolver el tema:

  • Tener muy claro el QUÉ y el PARA QUÉ vamos a comunicar:
    • Esta tiene que ser una pregunta previa que el líder del proyecto se debe hacer, máxime en los casos de Innovación Abierta en que hay varios y diferentes actores.
    • De la respuesta a esa pregunta y del conocimiento de las particularidades del equipo (cultura, procedencia, rol dentro del proyecto…) se derivará el CÓMO comunicarlo.
    • El CÓMO deberá ser posterior al QUÉ y PARA QUÉ.
    • Pero los tres serán imprescindibles en el planteamiento de la comunicación.
    • Conviene hacerlo siguiendo claramente dicho guion y hacerlo de forma concisa.
  • Conocer la expectativa sobre la comunicación:
    • Para comunicar bien es imprescindible escuchar bien.
    • Es conveniente tener una idea clara de la expectativa existente, qué se espera, qué se desea, etc.
    • Ello obliga al líder a conocer dichas expectativas y referirse a ellas cuando comunique el QUÉ y el PARA QUÉ, aún a pesar de que no se vayan a cubrir dichas expectativas.
    • Precisamente en el caso de que no se vayan a cumplir es cuando interviene más claramente el CÓMO.
    • Siempre es fundamental la claridad, veracidad y transparencia. El equipo no puede tener diferentes interpretaciones de lo que se comunica.
    • Recalcar lo fundamental para que no haya equívocos.
  • La comunicación no puede pasar por alto el reconocimiento:
    • Toda comunicación, en los proyectos de Innovación Abierta, implica a los resultados, acciones pendientes, consumo de recursos, resolver desencuentros, enfoque del proyecto, avances y retrocesos…
    • Será siempre preferible iniciar la comunicación reconociendo los logros, el trabajo bien hecho y hacerlo públicamente para que se sepa.
    • Lo anterior no implica que la comunicación no pueda ser de llamar la atención sobre temas no resueltos o conflictos larvados.
    • Pero el equipo tiene que saber que se comunican todas las cosas y no solamente las malas.
  • La comunicación debe contener un sentido de reto para el equipo:
    • Los anteriores tres puntos deben culminar con el lanzamiento de un reto al equipo del proyecto de Innovación Abierta.
    • Dicho reto atañe a todos y no solamente a parte del equipo o a uno de los actores.
    • Todo el equipo y empresas participantes deben ser conocedoras del reto y hacerlo propio en la medida que les afecte, aunque solamente sea el hecho de conocerlo.
  • La comunicación siempre implica agradecimiento final por el esfuerzo:
    • Dado que hemos lanzado un reto, es el momento de agradecer de antemano el esfuerzo que se va a realizar.
    • Además el líder deberá dejar la puerta abierta a replantear el reto en el caso de que surjan novedades que obliguen a ello. Flexibilidad.
    • Pero el reto, el equipo motivado por la comunicación bien realizada y con el reconocimiento de la labor bien hecha será la base sobre la que asentará la post-comunicación.

Una vez repasados estos puntos cualquiera puede pensar que son aplicables a todo tipo de comunicación y así es. En los casos de proyectos de Innovación Abierta es especialmente delicado ya que intervienen diferentes culturas (organizaciones y personas), formas de trabajar, líder perteneciente a otra organización que no es la propia, celos, resquemores sobre protagonismos o desequilibrio en tareas, etc.

Si a ello unimos la realidad de entorno turbulento (VUCA) en el que nada es fijo, sólido, estable y es, además, de cambio rápido todavía se vuelve más determinante el establecer un estilo de comunicación que contemple estos apartados.

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